Por décadas, Chile ha luchado por convertirse en un referente en la industria tecnológica de América Latina. Para las startups tecnológicas, el talento es el motor que impulsa la innovación. Y si alguien sabe cómo atraer talento de calidad y conectarlo con las mejores oportunidades globales, ese es Francisco Mardones.
Desde hace casi dos décadas, Mardones ha trabajado para convertir a Chile en un punto de entrada clave para startups tecnológicas que buscan expandirse a Latinoamérica. Pero su enfoque no se trata solo de «traer empresas», sino de crear un ecosistema donde el talento local crezca con desafíos interesantes y a nivel global.
Trayectoria: de California a Santiago, conectando mundos
La historia de Francisco en el mundo del software y las startups comenzó cuando, después de trabajar en California, decidió combinar lo mejor de ambos mundos. “Me gusta vivir en Chile, pero el tipo de trabajo y los desafíos eran mucho más tradicionales en ese tiempo”, comenta Francisco. “Entonces se me ocurrió esta idea media loca: traer empresas que tengan problemas entretenidos y hacerlo con gente acá en Chile”.
En 2005, cuando el trabajo remoto apenas era un concepto emergente, Francisco fundó su primera empresa en Chile para apoyar a AirSage, un startup de Atlanta. Su modelo era claro: facilitar que las compañías tecnológicas formaran equipos de desarrollo en Chile. Así fue como comenzó a surgir su reputación como un experto en “soft landing” para startups en Chile.
Evernote y el desarrollo de equipos Internacionales en Chile
Uno de los proyectos más destacados de Francisco fue con Evernote, una de las aplicaciones de productividad más reconocidas del mundo. Entre 2019 y 2023, ayudó a construir un equipo de 85 desarrolladores en Chile que trabajaron directamente en el desarrollo del producto.
«Formar un equipo de 85 personas en Chile con estándares globales fue un gran desafío«, recuerda Francisco. «Pero para mí, el foco no está en traer empresas solo para representar la marca o vender en Latinoamérica, sino en cómo podemos hacer que los profesionales chilenos tengan problemas interesantes en los cuales crecer profesionalmente”.
Este proyecto no solo demostró que el talento tecnológico en Chile está listo para asumir grandes retos, sino que también abrió puertas a más oportunidades para otros startups que buscan expandirse a Latinoamérica.
La estrategia de soft Landing y el futuro de las Startups en latinoamérica
Hoy, Francisco sigue en su misión de atraer más startups tecnológicas a Chile. “Mi trabajo es bajar el riesgo para las empresas que quieren establecerse en Chile. No se trata solo de contratar gente, sino de entender la cultura, las leyes, el entorno y facilitar todo el proceso de adaptación”, explica. Actualmente, está asesorando a Front, una startup californiana, en la construcción de un equipo de 100 personas en Chile.
En su rol como “champion” o facilitador, Francisco trabaja para que las startups extranjeras puedan operar de manera eficiente en el país, garantizando que el talento local no solo cumpla con las expectativas, sino que las supere. “Chile no es un país de bajo costo, es un país costo-efectivo. Aquí encuentras buenos profesionales que se quedan una buena cantidad de años y se dedican al trabajo con pasión”, afirma.
Un Chile más competitivo para el talento tecnológico y las Startups
Francisco cree que su trabajo no es solo una cuestión de negocio, sino una forma de contribuir a un ecosistema de startups en Chile más competitivo y dinámico. Además de su trabajo directo con startups, también se destaca su participación en la fundación Kodea, donde promueve la inclusión digital y el desarrollo de habilidades tecnológicas en jóvenes y mujeres. “Si queremos que Chile sea un hub tecnológico en Latinoamérica, necesitamos más que solo infraestructura; necesitamos talento que esté preparado para resolver problemas complejos a nivel global”, comenta.
Para él, es crucial que haya más diversidad y preparación en la industria tecnológica chilena. “El talento es lo que mueve esta industria. Chile puede tener buena infraestructura, pero si no creamos un ecosistema donde las personas tengan las competencias necesarias para competir globalmente, no vamos a despegar”, dice Francisco. Y eso es exactamente lo que busca cambiar a través de su trabajo.
Crear y crecer en el ecosistema de Startups en Chile
Francisco Mardones no es solo un consultor; es un facilitador de conexiones que cree profundamente en el potencial del ecosistema de startups en Chile. Con su experiencia, está ayudando a construir puentes entre el talento local y las oportunidades globales, preparando el terreno para un futuro donde Chile sea la «cabeza de playa» para la expansión de startups tecnológicas en Latinoamérica.
Su mensaje es claro: “Chile tiene el potencial para ser un hub tecnológico de clase mundial, pero para eso, necesitamos más empresas, más innovación y, sobre todo, más talento preparado”.