Por Cristóbal Esparza, Fundador de Vegy
¿Alguna vez te has imaginado cómo una pequeña empresa puede convertirse en una Startup exitosa? Permíteme compartirte mi experiencia y reflexiones sobre este apasionante viaje de transformación.
Desde el principio, mi propósito fue claro: crear la comida del futuro, una alternativa superior en términos de sabor, valor nutricional y componentes éticos y medioambientales. Soñaba con impactar la vida de muchas personas a través de un producto rápido, práctico y que solucionará sus necesidades.
Comencé con un pequeño restaurante vegano en la comuna de Pucón en 2019. Nuestra especialidad son platos gourmet y saludables. Con recursos limitados, gracias a un fondo de Sercotec, algunos préstamos y equipos reutilizados, formamos nuestro primer equipo principalmente con nutricionistas comprometidos con nuestra visión. El negocio fue rentable desde el primer mes, pero la pandemia nos obligó a tomar decisiones rápidas, como cerrar el local y apostar por lo digital.
Durante ese tiempo, nos adjudicamos subsidios públicos adicionales, habilitamos una página web y nos trasladamos a una dark kitchen para implementar un modelo de venta online y delivery. Las ventas aumentaron y la demanda online se disparó. Sin embargo, nos dimos cuenta de que el mercado en pequeñas comunas como Villarrica y Pucón era limitado y las principales aplicaciones de delivery no estaban disponibles. Fue entonces cuando decidimos expandir nuestra búsqueda de clientes y colaboraciones a otras comunas y regiones.
A lo largo de este proceso, hemos experimentado varios cambios y mejoras. Al finalizar la pandemia, abrimos una nueva tienda en Villarrica y obtuvimos fondos concursables de CORFO, lo que nos permitió probar pilotos de productos escalables y con potencial para su venta masiva. Pasamos de trabajar bajo pedido a un modelo de producción más eficiente, con alimentos empacados y listos para su consumo. Comprendí que «nada es más rápido que algo que ya está listo». Esta mentalidad nos llevó a buscar constantemente la retroalimentación de nuestros clientes y a mejorar nuestros productos y procesos.
La innovación y la escalabilidad han sido pilares clave en nuestro crecimiento. Buscamos apoyo en el ecosistema emprendedor, colaboramos con otros emprendedores e incorporamos nuevos conocimientos para fortalecer nuestros productos y ampliar su tiempo de vida. Ahora, además de ser equilibrados y saludables, nuestros platos están fortificados con vitaminas y minerales. También hemos diversificado nuestros canales de venta y buscado nuevas oportunidades de distribución para llegar a más clientes potenciales.
Sin embargo, lo más importante que he aprendido como emprendedor en estos últimos años, es que mi verdadera motivación se encuentra en el impacto que puede generar. Rendirme nunca fue una opción, pero tampoco lo fue conformarme con un crecimiento orgánico seguro. Por eso, tomé la decisión de dar el salto hacia un modelo de crecimiento acelerado. Busco socios cofundadores e inversores que compartan mi visión y quieran sumarse a Vegy para lograr un impacto disruptivo y potenciar al máximo nuestro potencial.
En conclusión, espero que mi historia motive a otros emprendedores a seguir persiguiendo sus sueños y a no rendirse frente a los desafíos. Esta historia apenas comienza y está llena de resiliencia y una obsesión por impactar con el propósito. También deseo sembrar la semilla del interés en posibles socios cofundadores e inversores que conecten con nuestro proyecto y quieran formar parte de esta emocionante aventura llamada Vegy.
¡Recuerden, juntos podemos hacer una diferencia en el mundo de la comida!