Nathalie Wilk, Founder de Neopausia y Culotte
“¡Pero qué buen nicho encontraste!”, es uno de los comentarios que más he recibido de personas que, de una u otra manera, han evaluado mis empresas. Y cada vez me pasa por la cabeza: ¿Pero cómo puede ser un nicho la mitad de la población mundial? Mis últimas dos empresas FemTech, Culotte y Neopausia, buscan precisamente desafiar esta percepción.
El término FemTech fue creado por Ida Tin en 2016, la fundadora de Clue, una de las primeras apps de trackeo de salud menstrual y fertilidad. Se refiere a herramientas, productos, servicios, dispositivos y software que utilizan la tecnología e innovación para abordar problemas de salud femenina.
Por muchos años ha sido un mercado bien desatendido: La inversión en investigación y desarrollo (I+D) en la salud de la mujer en 2021 apenas alcanzó el 2% de la inversión del I+D total a nivel global1. Sin embargo, cada vez surgen más empresas que se preocupan de las necesidades femeninas y nuevos estudios demuestran que el mercado FemTech tiene un potencial enorme por desbloquear. Con mujeres gastando 29% más en salud que hombres y mostrando una mayor afinidad por las herramientas digitales de salud2 el mercado global de FemTech podría elevarse a un billón de dólares en 20403.
Creé Culotte Calzones Menstruales en 2020 rompiendo tabúes y mitos alrededor de la menstruación vía una comunidad educativa de más de 240.000 personas en RRSS. Con los calzones menstruales introduje a Chile una opción reutilizable, cómoda y linda para la menstruación que resultó en un crecimiento exponencial. En menos de 2 años logré vender Culotte y realizar un exit.
En mi nueva startup Neopausia apuntamos a ser el “one stop shop de la menopausia” digitalizando la educación, su atención médica, tratamiento y acompañamiento. La transición menopáusica puede durar hasta 20 años, está lleno de tabúes y desinformación y afecta el bienestar de la mujer no solo a corto plazo con síntomas molestos en el día a día, sino a largo plazo dañando su salud cardiovascular, aumentando el riesgo de osteoporosis y Alzheimer al no ser tratado correctamente. En marzo lanzamos un primer piloto de programa educativo con ya más de 200 mujeres inscritas y nuestro Instagram explota de mujeres que buscan ayuda y guía.
Los dos ejemplos demuestran lo que tienen en común la mayoría de FemTechs: los problemas que resuelvan son demasiado reales, grandes y dolorosos.
Otra cosa que tienen en común: Aunque el mercado es grande y necesitado, todavía falta visibilidad, entendimiento y empatía de parte de los tomadores de decisiones. Un desafío importante radica en presentar estas innovaciones a inversionistas y otros actores predominantemente masculinos que pueden tener dificultades en entender la magnitud del problema o sentirse incómodos hablando sobre los problemas y necesidades de la salud femenina.
Es por eso que las inversionistas femeninas juegan un papel crucial en el avance del campo. Las mujeres en posiciones ejecutivas en firmas de inversión, roles de liderazgo en empresas o gobierno respaldan cada vez más a fundadores que abordan problemas que afectan desproporcionadamente a las mujeres.
¿Es fácil emprender en FemTech? – Por supuesto que no, la pasión y la perseverancia son claves. Pero la oportunidad de impactar positivamente el bienestar de otras es una motivación mayor.
Invito a más emprendedores y emprendedoras, inversionistas y otros actores del mundo privado y público a unirse a este tipo de negocios, a invertir en ellos, no solo capital sino también convicción y compromiso. Les prometo que- NO es un “nicho” y que es tremendamente gratificante de resolver.
Fuentes: