Por Abraham Lazo, gerente general de Lofwork.
Llevo poco más de 8 años asistiendo a diferentes emprendedores y empresario que muchas veces inician sus startups con ideas geniales, energía por doquier y enfocados al 100% en lograr un anhelado levantamiento de capital.
Vamos bien, hay entusiasmo, se formó un buen equipo, se consiguió inversión, hay interesados en el producto/servicio, pero… en el tiempo notan que los números no acompañan, las ventas no son suficientes, será ¿falta más dinero? o ¿la idea no era tan buena?, y como resultado final se desmorona la empresa, llegando a un quiebre sin retorno.
¿Y esto por qué ocurre?
Mi visión es que algunas variables como el mercado, la competencia, la incapacidad de pivotar, pueden ser algunas de las más nombradas como causa principal, pero una causa que no siempre es considerada tiene relación directa con la ausencia de un buen orden financiero.
Los equipos se enfocan en crear una solución espectacular, pero olvidan la importancia del orden propio. El “yo lo puedo hacer sin ayuda” a veces le gana al “necesito algo de orientación”. Por último, para tener todas las cartas sobre la mesa y tomar una buena decisión, es importante estar bien hacia el cliente y hacia nuestra empresa, y eso conlleva ordenarse de un inicio, clarificar cuales son los costos fijos, los variables, los ingresos, hacer una proyección.
Y sin duda, tomar la asistencia de alguien, un equipo (como Lofwork) que te pueda guiar en la correcta decisión contable, tributaria y de RRHH para que no andes a tropiezos administrativos en un inicio.
No se imaginan la cantidad de dinero que he visto irse a la basura en pago de multas, a veces porque no se declaró algo en tiempo y forma, atribuido a desconocimiento u olvido, entre muchas causas adicionales.
Entonces, como punto inicial de sus negocios no olviden que tanto la solución como las finanzas son importantes para el buen comienzo de una startup, saber que aspecto de la tributación es la que le conviene al crecimiento de la compañía, que beneficios tributarios existen y cuáles son las responsabilidades que debemos cumplir de forma recurrente, ya sea en contabilidad, gestión de personas, etc.
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