Cristian Tala, en menos de 50 minutos, resumió gran parte de su vida y su viaje como emprendedor, que lo llevó a tener un exit en 2021 con su emprendimiento Pago Fácil, luego de ser vendido en alrededor de US$20 millones a BCI Pagos y Evo Payments.
“El mejor consejo para todo tipo de personas, especialmente los que quieren emprender es: si quieres hacer algo, sólo hazlo, porque siempre vas a encontrar una excusa. La diferencia entre las personas que lo logran y los que no, son los que dicen: «A la mierda las excusas”, afirmó, luego de relatar que se atrevió a concretar ese negocio que ya tenía clientes, a pesar que ni siquiera tenía un nombre.
Luego de trabajar en la empresa familiar durante cinco años, y de viajar a Holanda a estudiar un MBA, tomó la decisión de dedicarse totalmente a su negocio. Levantó capital en Broota, crowdfunding para invertir en Startups y comenzó lo que sería Pago Fácil.
“Hubo varias cosas que sabía cuando armé mi startup, aprendizajes que tuve de la empresa familiar, fracasos de otras startups donde había invertido antes, que me ayudaron a partir bien. Y también sabía que mi startup tenía que ser vendida y eso lo pensé sólo porque yo había invertido anteriormente en otros emprendimientos y era lo que yo esperaba de mi inversión”, explica.
Como único founder, el viaje como emprendedor fue 24/7, lo que no sólo consumió todo su tiempo, sino también afectó su salud gravemente.
“Cuando tuve el exit, hubo personas que me decían que había tenido suerte. Pero se olvidaron que estuve trabajando años sin parar, incluido feriados y fines de semana. Quizás hubo algo de suerte por haber encontrado a alguien que quiso comprar la empresa, pero la realidad es que no sólo fue suerte, sino también pasión, obsesión. No quería dejar esto de lado (la startup), porque había demasiadas personas que estaban confiando en mí. No sólo los clientes que dependían de nosotros para poder vender online, sino también muchos familiares, amigos y desconocidos que invirtieron en mí, porque me creyeron. ¿Cómo los iba a defraudar?”, relató.
Y ese compromiso lo ha llevado a desarrollar una filosofía sobre cómo debería funcionar el ecosistema emprendedor. “Cuando apoyas a una startup terminas apoyando a emprendedores que en un futuro es muy posible que te apoyen a ti. Es parte de ese círculo virtuoso”, asevera.
Y agrega: “Entre los inversionistas que me apoyaron en Broota hubo amigos y familia, pero también mucha gente que yo no conocía. De hecho, entre ellos estaba Nico Fuenzalida de Poliglota, pero yo no lo conocía. Y ahora, cuando Poliglota levantó capital, yo invertí en ellos. Porque así se tiene que hacer. Si hay gente que creyó en ti, por qué tú no creerías en ellos. De hecho, si una startup recibe capital, debería tener la responsabilidad de invertir en otros, cuando tenga la capacidad de poder hacerlo. Esa es mi filosofía”.
Convicción que lo ha llevado a escribir un libro: «La inversión en startups» y a crear un medio de comunicación, para apoyar a los emprendedores: El Ecosistema Startup.
Definitivamente, la historia de este emprendedor, tienes que escucharla en palabras de su protagonista. ¿Dónde? En este nuevo episodio de MAS Pitch de DF, con el periodista Juan Pablo Silva.
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