La startup Alto, creada en La Plata y con ingresos por u$s 4M, fue adquirida por una firma brasileña buscando talento tech regional.
Alto, la startup platense especializada en desarrollo de software, dio un gran paso en su crecimiento: fue adquirida por una empresa brasileña, en una operación que refleja el valor del talento tecnológico argentino en el ecosistema regional.
La noticia se conoció el 30 de mayo de 2025 y confirma que Alto, fundada en la ciudad de La Plata, ya alcanzaba una facturación de u$s 4 millones anuales al momento de la compra. Este logro pone en evidencia el éxito de sus soluciones dentro del mercado tech, especialmente dentro del mundo del desarrollo de software y la tercerización de servicios IT.
¿Qué es Alto y por qué interesa tanto?
Alto opera como un marketplace de talento IT, conectando desarrolladores calificados con empresas que necesitan soluciones tecnológicas a medida. Su modelo le permitió escalar rápidamente y posicionarse en una región donde la demanda de talento digital está en constante crecimiento.
Este enfoque innovador, sumado a la calidad del trabajo de sus profesionales, llamó la atención de compañías internacionales. Finalmente, una empresa brasileña (aún no revelada por completo) concretó la compra, con el objetivo de fortalecer su presencia en América Latina y potenciar sus capacidades de desarrollo.
Latinoamérica como polo de innovación
La adquisición de Alto no es un caso aislado. En los últimos años, muchas startups tecnológicas de Argentina y otros países de la región vienen captando la atención de inversores globales. Talento bien formado, costos competitivos y creatividad son algunos de los activos más atractivos para el mercado internacional.
Así, Alto se suma a una creciente lista de empresas emergentes nacidas en Latinoamérica que logran escalar y expandirse gracias a fusiones o compras estratégicas. Además del beneficio económico, esta operación también abre oportunidades para el equipo humano detrás de la startup, y podría traer nuevas inversiones al país.
El camino de Alto reafirma el rol de Argentina como un semillero de talento digital. La historia recién empieza, pero ya es un caso inspirador dentro del mundo emprendedor tech.
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