“El 22 de junio junto a El Ecosistema Startup lanzamos la noticia públicamente de que partiríamos nuestra primera ronda de capital a través de inversionistas ángeles. Luego, el 5 de julio, organizamos un meet con 15 potenciales inversionistas”, cuenta Michelle Schnitzer, cofundadora y CEO de BondUp.
El objetivo en un principio era recaudar $100 millones (US$121.156) que serían destinados a la contratación de equipo tecnológico y comercial para soportar y consolidar el crecimiento de esta startup chilena está teniendo a través del B2B, y “así convertirnos en una herramienta indispensable para ellos y no ser solo una moda pasajera”.
“Sin embargo, dada a la alta convocatoria y disposición tuvimos con los inversionistas y dado que partimos de forma agresiva con Caja Los Andes, que tiene un potencial de 400 mil usuarios sumado a otra negociación final con un Banco, decidimos extender la ronda a $150 millones (US$181.734), para así tener un runway de al menos 10 meses y poder enfocarnos en lo que realmente importa ahora, vender y consolidarnos”, agrega.
Michelle asegura que se sorprendió por la cantidad de potenciales inversionistas que se unieron a esa reunión vía meet. “Fue algo totalmente fuera de lo tradicional porque la mayoría de las startups se juntan uno a uno con cada inversionista, pero no había tiempo para seguir ese camino. Lo preferí hacer de forma más rápida y masiva para así cerrar el levantamiento en el menor tiempo posible”.
En dos semanas ya habían superado el monto objetivo inicial y ya alcanzan el 90% de la nueva cifra, todo en menos de un mes y con la participación de 12 inversionistas.
Una startup con propósito
La historia de BondUp comenzó desde la experiencia personal de esta ingeniera comercial de la Universidad del Desarrollo. La relación estrella que mantenía con su abuela la llevaron a entender la profunda soledad que enfrenta este segmento a diario. Así, empezó a investigar respecto a iniciativas activas en otros países.
La falta de herramientas que tenían los adultos mayores para poder conectar con otros, para hacer nuevos amigos y para mantenerse activos, era evidente. En agosto de 2022 encontró al socio que tanto buscó y partieron con el primer MVP de esta startup que mostró crecimiento de forma inmediata.
“Lo que me di cuenta al hablar con los inversionistas y por qué generamos tanto interés, es porque todos empatizan demasiado con nuestro propósito, todos de alguna forma han visto esa realidad ya sea en sus mamás, abuelos y otros, ven el potencial que tiene este segmento que está en crecimiento a nivel global, pero además, entienden el dolor que estamos solucionando”.
En las próximas dos semanas, Michelle espera cerrar esta primera ronda de inversión de BondUp. “El mensaje para los inversionistas es que se motiven y se atrevan a invertir en etapa temprana, que si bien, tiene sus riesgos, es la oportunidad para ser parte de la próxima red social para la generación mayor más importante del mundo”, concluye.
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